LECTURA DEL PROFETA EZEQUIEL 17,22-24
Esto dice Yavé: Yo mismo sacaré del cedro una patilla y la plantaré en una montaña alta y segura. La plantaré en una alta montaña de Israel, se desarrollará, dará frutos y se convertirá en un cedro magnífico; bajo él descansarán aves de todas las especies, se cobijarán a la sombra de sus ramas. Todos los árboles del campo sabrán entonces que yo soy Yavé: yo rebajo al árbol que se eleva y levanto al árbol humillado; seco al árbol verde y hago florecer al árbol seco; yo Yavé lo dije y lo haré.
ESCENIFICACIÓN 1
PERSONAJES: Tres hombres y una mujer.
EZEQUIEL: Todos estamos orgullosos del cedro que tenemos
SIXTO: Es esbelto y hermoso.
MARGARITA: Todos vienen a verlo. Lo admiran.
EZEQUIEL: Del cedro voy a arrancar unas ramitas. Las voy a plantar.
SIXTO: ¿Qué va a pasar?
EZEQUIEL: Esa ramita va a ser un árbol pequeño que va a crecer.
SIXTO: Va tardar hasta que sea grande.
EZEQUIEL: Lo vamos a plantar en la cima del cerro para que todos vean como crece.
MARGARITA: No va a igualar al cedro viejo que es grande y hermoso.
EZEQUIEL: Va a ser un árbol que atraiga a todos para sentarse a su sombra.
CARLOS: ¿Qué significa esto?
EZEQUIEL: El árbol grande va a ser destruido. Es nuestro enemigo el imperio de Babilonia. El injerto es el pueblo escogido por Dios, que va a ir creciendo poco a poco hasta convertirse en un árbol grande.
ANIMADOR:
- ¿Quiénes son los más poderosos en Bolivia? 2. ¿Quiénes son los más débiles en Bolivia?
- ¿Cuándo formamos parte del pueblo escogido por Dios?
- ¿Qué cosas hacemos como escogidos por Dios?
EVANGELIO DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO SEGÚN SAN MARCOS 4,26-34.
Jesús dijo además: «Escuchen esta comparación del Reino de Dios. Un hombre esparce la semilla en la tierra, y ya duerma o esté despierto, sea de noche o de día, la semilla brota y crece, sin que él sepa cómo. La tierra da fruto por sí misma: primero la hierba, luego la espiga, y por último la espiga se llena de granos. Y cuando el grano está maduro, se le mete la hoz, pues
ha llegado el tiempo de la cosecha.>>> Jesús les dijo también: «¿A qué se parece el Reino de Dios? ¿Con qué
comparación lo podríamos expresar? Es semejante a una semilla de mostaza; al sembrarla, es la más pequeña de todas las semillas que se echan en la tierra, pero una vez sembrada, crece y se hace más grande que todas las plantas del huerto y sus ramas se hacen tan grandes, que los pájaros del cielo buscan refugio bajo su sombra.» Jesús usaba muchas parábolas como éstas para anunciar la Palabra, adaptándose a la capacidad de la gente. No les decía nada sin usar parábolas, pero a sus discípulos se lo explicaba todo en privado.
ESCENIFICACIÓN 2
PERSONAJES: Dos hombres, tres mujeres.
SERAFÍN: Estoy feliz. He sembrado.
CLARA: Así puedes esperar frutos.
SANTIAGO: Ya puede llover o hacer sol, la semilla sigue creciendo.
MICAELA: Ya se ven las ramitas que están saliendo. Pronto van a ser tallo y luego planta que da fruto.
SERAFÍN: Es como un grano de mostaza que es una semilla muy pequeña.
CLARA: Da gusto verla crecer.
SANTIAGO: Luego se convierte en un árbol grande.
CLARA: esto lo contó Jesús.
SANTIAGO: Como un ejemplo. Los que creemos de verdad en Jesús somos un pequeño grupo.
MICAELA: Este grupito tiene que ir creciendo.
SERAFÍN: Y estar convencidos de que tenemos que vivir igual que Jesús haciendo obras buenas.
CLARA: El que cree en Jesús tiene que sembrar obras buenas para que surga un mundo mejor.
ANIMADOR:
- ¿En que se demuestra que tenemos interés en conocer a Jesús?
- ¿Qué cosas buenas hacemos como seguidores de Jesús?
- ¿Existe en nuestra comunidad algún grupo que quiere creer más en Jesús?
- ¿Los que van creyendo en Jesús aumentan o no crecen en número?