Fuente: Vatican Media
El Papa Francisco recordó a los participantes de la Conferencia “Una familia Humana” promovida por el Movimiento de los Focolares la importancia del diálogo interreligioso para promover la paz en el mundo.
La Conferencia Internacional Interreligiosa “Una Familia Humana” empezó el 31 de mayo en el Centro Mariapoli de Castel Gandolfo en Roma y terminó el 4 de junio con una peregrinación a Asís.
Una delegación de participantes visitó el 3 de junio al Papa Francisco. Durante la visita el Pontífice agradeció el camino de unidad que inició la fundadora del movimiento, Chiara Lubich, recordando que el fundamento de esta experiencia es el Amor de Dios que se realiza en el amor mutuo, la escucha, la confianza, la aceptación y el conocimiento el uno del otro, en el pleno respeto de nuestras identidades respectivas; que han decantado en las acciones conjuntas para responder al grito de los pobres, en el cuidado de la creación y en el trabajo por la paz.
El Movimiento de los Focolares es una gran y variada familia, es un “nuevo pueblo nacido del Evangelio”, como lo definió la fundadora, Chiara Lubich, que lo inició en 1943 en Italia, durante la segunda guerra mundial, como una corriente de renovación espiritual y social. Su objetivo es cooperar en la construcción de un mundo más unido, impulsado por la oración de Jesús al Padre “para que todos sean uno” (Jn 17,21), en el respeto y valorización de las diversidades. Sus prioridades son el diálogo, el compromiso constante de construir puentes y relaciones de fraternidad entre las personas, los pueblos y los ámbitos culturales.