Carisma
Ir en busca de los más necesitados.
Año de fundación de la congregación en Bolivia
El 30 de julio de 1981 en Sapecho.
¿Cuántas hermanas tiene la congregación en Bolivia?
Una religiosa, la penúltima hermana murió con cáncer el 2018.
¿Qué poblaciones acompaña la congregación?
Niños, adolescentes, jóvenes, mujeres con sus hijos, migrantes.
¿Cuáles son los apostolados más significativos que tienen?
Llegamos a Alto Beni a trabajar con los mosetenes y los indígenas y ribereños, siendo la primera congregación que vive en su tierra y que se apropia de las necesidades y desafíos. Apoyamos a la organización de las comunidades a través de evangelización y la formación de líderes para reivindicar sus luchas sociales. Por ello, nos encontramos presentes en la originaria e histórica Marcha Indígena «Por el territorio y la Dignidad» el 15 de agosto de 1990. Asimismo, se apoyó a la creación de la Cooperativa El Ceibo en un momento donde se empezó a dar el valor al cacao y a la producción de castaña.
Llegamos en 1991 a Pampahasi y el encuentro con la gente fue un choque cultural porque no nos recibían en sus casas hasta que realizamos las novenas de Navidad y empezamos a acompañar a las familias del barrio, preferentemente a las más pobres. Formamos jóvenes líderes muy comprometidos, trabajamos la equidad y la igualdad para promover comunidades de paz, desde el valor al que es diferente. El respeto al otro que piensa distinto, el respeto a las masculinidades.
Con las mujeres hacemos el acompañamiento integral con el apoyo de CARITAS y brindamos el servicio de asesoría legal para realizar las denuncias de maltrato a las madres y niños. Nuestra hermana de profesión psicóloga hacía las terapias para fortalecer la autoestima y resiliencia.
Somos parte de la red «Kawsay Bolivia», trabajamos en la prevención de trata y tráfico humano y en el acompañamiento a víctimas y sobrevivientes de este mal. Realizamos talleres sobre el tema en las unidades educativas y también en la visita a los hogares que acogen a estas personas.
¿Podrían compartir algunas experiencias relevantes que marcaron la vida de la congregación?
Formamos mujeres en la comprensión de su autoestima y del valor que poseen en el núcleo familiar, la sociedad y en la Iglesia. Aprendieron a defenderse, muestran actitudes diferentes ya que se respetan, respetan a sus hijos y a la familia, consideran que son más decididas; defienden sus derechos, son líderes y son capaces de apoyar y acompañar a otras mujeres que están pasando por la misma situación. Sin embargo, este nuevo actuar nos trajo enemistades y desencuentros de sus parejas, pues vienen a decirnos que no nos «metamos» en sus vidas; pese a todo, son resultados satisfactorios porque cambiaron y el acompañamiento dio fruto. Se podría decir que tienen un proyecto de vida.
Fortalecimos los programas de alfabetización que fueron aprovechados por las hermanas (30 mujeres aproximadamente entre 20 y 50 años) para el aprendizaje de lectura y escritura y su mejor comprensión. El problema que enfrentaban era que les daban a leer documentos jurídicos y no los comprendían; por eso, el programa y nuestra ayuda les vinieron muy bien. Nos encontramos en barrios periféricos, caminamos con las mamás y con sus hijos que sufren violencia, acompañamos el proceso de denuncia. Por ello nos llaman en Barrio Chijini las «hermanas policías», porque siempre llamamos a la policía. Allí hallamos a los crucificados de hoy.
Fuente: Presencia y Acción Misionera de la Vida Consagrada Femenida en Bolivia (1655-2023) Karina García Riveros
Estimada Editth gracias por escribirnos, puedes comunicarte con la Hermana Susana al 70121141 ella es parte de l congrregación y sin duda te dará mas datos.