Del 29 de mayo al 5 de junio se celebra la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos. Cada año los cristianos de todo el mundo nos unimos en oración para crecer en la unidad, en Bolivia, celebramos entre las Solemnidades de la Ascensión del Señor y Pentecostés.
Creemos que solamente obedeciendo el mandato de Jesús: “Que todos sean uno” (Jn 17,21) podemos dar testimonio de vivir la unidad en la diversidad; solo a través de nuestra unidad en Cristo seremos capaces de luchar contra la injusticia y ponernos al servicio de los más necesitados.
Este año nos ilumina el texto: “Nosotros hemos visto aparecer su estrella en el Oriente y venimos a adorarlo” (Mt 2,2). Con estas palabras los Magos llegados de Oriente buscan al Niño recién nacido. Los Magos manifiestan la unidad de todos los pueblos deseada por Dios. Viajan desde países lejanos, representan diversas culturas, e impulsados por la misma hambre de ver y conocer al rey recién nacido llegan a la pequeña casa de Belén, adoran con sencillez y ofrecen sus regalos.
Los cristianos estamos llamados a ser una señal, ante el mundo, de la unidad que Dios trae consigo. Procedentes de diferentes culturas, razas y lenguas, los cristianos compartimos una misma búsqueda de Cristo y un deseo común de adorarlo.
La misión del pueblo cristiano es la de ser un signo, como la estrella, que guíe el anhelo de Dios de toda la humanidad hacia Cristo, y convertirse en mediación para que Dios lleve a cabo la unidad de todos los pueblos.
Únenos, Señor, a los que venimos del Norte y del Sur, del Este y el Oeste,
a los jóvenes y a los ancianos, a hombres y mujeres,
para que todos juntos nos postremos ante Ti y te adoremos,
reconociéndote como nuestro Rey celestial. Amén.