CELEBREMOS LA SEMANA SANTA EN FAMILIA
En
esta cuarentena decretada por el Gobierno Nacional, hemos de ser solidarios con
Jesús, cuya Pasión, Muerte, Sepultura y Resurrección se expresa hoy en nuestro
país y en el mundo que sufre la pandemia del coronavirus que golpea con más
fuerza a los pobres.
Cuando
la Familia (las familias) se reúne en Nombre del Señor se
transforma en “Iglesia Doméstica” o “Iglesia Hogar”: “Donde dos o más se reúnan en mi Nombre, Yo estoy en medio de ellos” (Mt
18,20).
Este
material, elaborado por la Sección Liturgia del Área de Evangelización, ofrece
breves reflexiones bíblicas y sugerencias para vivir, día a día, la Semana
Santa 2020. De esta manera cada familia, verdadera “Iglesia Hogar” celebrará
los Acontecimientos centrales de su fe y de su compromiso misionero. Por
extensión, las comunidades religiosas, seminarios, casas de formación… pueden
emplearlo.
NOTA: Las instrucciones de nuestros Obispos
para esta Semana Santa y las celebraciones litúrgicas (Domingo de Ramos, Jueves
Santo, Viernes Santo, Vigilia de la Noche Pascual y Domingo de Resurrección) en
forma telemática (redes sociales, videos, radios, televisión…) tienen preferencia sobre el material que
ofrecemos.
Los
Ministros que han recibido el Sacramento del Orden deben tener en cuenta el
Decreto de la Congregación del Culto Divino y Disciplina de los Sacramentos
(Prot N 153/20) “En tiempo del COVID 19” para ejercer su ministerio pastoral, así como las recomendaciones del Obispo de
cada jurisdicción de Bolivia.
SUBSIDIO PARA LA PENITENCIA EN FAMILIA, DURANTE LA EMERGENCIA SANITARIA.
¿Dónde puedo encontrar a un sacerdote, a un confesor? porque no se puede salir de casa.
¿Qué puedo hacer si no encuentro sacerdotes?”
Tú haz lo que dice el Catecismo (n. 1457). Es muy
claro: si no encuentras un sacerdote para confesarte, habla con Dios, es tu padre, y dile la verdad: “Señor he cometido esto, esto, esto…, perdóname”, y pídele perdón con todo el corazón, con el Acto de contrición y prométele: “Después me
confesaré, pero perdóname ahora”. Y enseguida volverás a la gracia de Dios. (Homilía del Papa
Francisco en Santa Marta, 20/03/2020)