Carisma
Bebemos la espiritualidad de San Francisco y Santa Clara. Espíritu franciscano. La espiritualidad franciscana es encarnación terrenal; Dios está cerca de la Creación, no lejos, «allá arriba». Como San Buenaventura dijo: «Dios se inclina hacia nosotros, para levantarnos». La espiritualidad franciscana venera la Eucaristía como la humildad de Dios hacia nosotros.
Año de fundación de la congregación
El 19 de noviembre de 1972 en Laja.
¿Cuántas hermanas tiene la congregación en Bolivia?
Hacemos presencia en cuatro departamentos de Bolivia. En La Paz, dos comunidades, en Cochabamba cuatro, Santa Cruz, dos y Tarija, una comunidad.
Todas las hermanas somos bolivianas y contamos con una hermana ecuatoriana.
¿Qué poblaciones acompaña la congregación?
Niños, adolescentes, jóvenes, mujeres, adultos, personas de la tercera edad.
¿Cuáles son los apostolados más significativos que tienen?
Contamos con varias pastorales, la educación es una de las más importantes. Acogemos en nuestro carisma a 1.000 niños, adolescentes y jóvenes por gestión, impartimos clases de religión en primaria; también, colaboramos en la parte administrativa de las unidades educativas. Sostenemos dos comedores populares para ayudar a las familias de escasos recursos. Alimentamos a 200 beneficiarios por año, todos en etapa escolar.
Tenemos presencia en Copacabana y colaboramos en el sistema educativo, tanto del pueblo como de comunidades alejadas. Allí vemos mucha necesidad en todos los aspectos de la vida del campesino. Los niños no asisten a la escuela porque las distancias son largas y tampoco hay mucho interés por parte de los padres o los abuelos, quienes son los que se quedan a cuidarlos y no pueden llevarlos.
En La Paz se cuenta con un Centro de Salud que beneficia a 50 niños y jóvenes que son lustradores de zapatos la mayoría. También se apoya a los de la tercera edad en medicina general, fisioterapia, rayos X y estudios de laboratorio. Gran parte de las personas están en situación de calle.
En Santa Cruz contamos con la misión de los pueblos indigenas. En Cochabamba aportamos dos internados de formación académica para la mujer. Se les apoya con clases de costura y tejido, además se les provee de todo el material que precisan, como ser los palillos, los crochets, las lanas y otros. Cuando lanzan su emprendimiento, son ellas las que adquieren los productos de los mercados de la ciudad. En Tarija, también, tenemos el comedor para los niños y jóvenes de la calle y hemos visto la necesidad de poner un consultorio psicológico para que puedan expresar sus emociones y sentimientos, pues muchos de ellos viven con traumas en sus familias y las calles han sido sus escuelas de vida.
Beneficiamos con viveres a adultos mayores de escasos recursos o en situación de calle. Costeamos sus gastos médicos y gestionamos intervenciones quirúrgicas que son de alto costo y que ellos no pueden hacerlo y a veces mueren sin ser asistidos ni médica ni espiritualmente.
¿Podrían compartir algunas experiencias relevantes que marcaron la vida de la congregación?
Oramos por la tolerancia y la convivencia de las personas a las que llegamos; la vida ha sido muy dura con ellas, existe mucha pobreza material y espiritual. Viven con baja autoestima y son muy reservadas, es triste su soledad. Nos acercamos a las familias a partir del evangelio. Sin embargo, tenemos algunos aspectos que debemos agradecer a la comunidad; por ejemplo, la celebración de su fiesta patronal a San Francisco que es muy esperada.
Fuente: Presencia y Acción Misionera de la Vida Consagrada Femenida en Bolivia (1655-2023) Karina García Riveros
