“La lógica del odio y la violencia nunca se puede justificar” (Papa Francisco).
El 27 de enero se recuerda el Día Internacional en Memoria de las Víctimas del Holocausto. Esta fecha fue oficialmente proclamada por la UNESCO en el año 2005 conmemorando la liberación de los prisioneros del campo de concentración y exterminio nazi de Auschwitz-Birkenau en 1945.
La UNESCO establece este día para recordar a las víctimas judías y condenar sin reservas todas las manifestaciones de intolerancia religiosa, incitación, acoso o violencia contra personas o comunidades por motivos de origen étnico o creencias religiosas, dondequiera que se produzcan.
El Papa Francisco recordó este día afirmando que la guerra misma es una negación de la humanidad e instó a que no nos cansemos de rezar por la paz, por el fin de los conflictos, el cese de las armas en todos los lugares de guerra.
“Estén atentos a cómo ha empezado este camino de muerte y exterminio, de brutalidad. Recordar es una expresión de humanidad, recordar es signo de civilización. Recordar es una condición para un futuro mejor de paz y de fraternidad” (Papa Francisco).